El profesorado del IES ENRIC VALOR de Monòver quiere manifestar su rechazo a la situación que estamos sufriendo en nuestro centro desde comienzo de curso.
“Durante las vacaciones de verano, cuando ya teníamos la planificación del curso 2022-2023 terminada, se nos comunica en un claustro extraordinario que tenemos que compartir nuestras instalaciones con el CEIP ESCRITOR CANYÍS porque las obras del plan Edificant en su centro no han finalizado. Nosotros, a pesar de los incontables inconvenientes que esto comporta en la dinámica educativa y no haber recibido una notificación oficial, aceptamos la situación y colaboramos porque nos aseguran que la nueva situación solo durará el curso 2022-2023.
El pasado 5 de abril, en un claustro de cierre de trimestre el director del centro nos comunica y confirma que la escuela continuará ocupando nuestras instalaciones durando, como mínimo, un curso escolar más. Esta noticia nos deja desconcertados y estupefactos, puesto que había quedado clarísimo que únicamente tendríamos que hacer el gran sacrificio durante el curso escolar 2022-2023.
No podemos consentir que la situación que arrastramos desde la pandemia de la COVID-19 se alargue más, no podemos consentir que las promociones herederas de la pandemia se vayan del centro sin recibir una educación de calidad, no podemos consentir renunciar un año más a todos los proyectos alentadores y necesarios que están en pausa desde el 2020 por carencia de espacio; no podemos y no queremos.
Queremos recuperar todos los espacios que hemos perdido, porque nosotros no tenemos que asumir todas las consecuencias de un problema que no nos corresponde, por tanto, se tendría que encontrar otra solución que no afectara en toda la juventud de nuestra localidad.
Este año hemos cedido al CEIP ESCRITOR CANYÍS 11 aulas que estábamos utilizando y hemos compartido otras dependencias del centro, un espacio muy necesario para desarrollar la tarea educativa con normalidad.
Esto ha provocado la gestión de un inmenso esfuerzo para que El profesorado del IES Enric valor nos solidarizamos con la comunidad educativa del CEIP Escriptor Canyís por la situación que padece ajena a su trabajo docente, pero la pérdida del espacio cedido a este centro ha comportado graves problemas para desarrollar nuestra tarea educativa, entre los cuales destacamos los siguientes:
Aulas de Música
No disponemos de aula de Música y las clases se tienen que hacer en el patio. El profesorado y el alumnado se ven obligados, en todas las sesiones, a llevar las sillas y atriles y devolverlas al mismo lugar con la consiguiente pérdida de tiempo. Por lo tanto, estos espacios no son los adecuados para impartir clase ordinaria y, por esta razón, las explicaciones de teoría y preparación de actividades son prácticamente nulas. Además, los instrumentos de percusión de láminas, batería y gran percusión están almacenados por varias dependencias del instituto y no podemos hacer uso de ellos. Todo esto provoca que no podamos realizar una buena parte de las actividades de música programadas.
Aulas de Dibujo
No disponemos de aula de Dibujo y las clases se tienen que hacer en el aula ordinaria o en cualquier rincón del centro, como por ejemplo, las escaleras y los pasillos. El hecho de no disponer de aulas específicas de Plástica ha comportado que no se puedan realizar muchos de los trabajos o proyectos programados por la falta de espacio y medios. El traslado de parte de los recursos necesarios para impartir la materia a cada una de las aulas de los diferentes grupos conlleva una reducción del tiempo útil disponible para dar clase. Como no hemos podido disponer, utilizar y prestar en todo momento los recursos materiales de los cuales disponía el Departamento de Dibujo en las aulas específicas, se ha visto muy perjudicada, sobre todo, la parte del alumnado con menos recursos.
Laboratorios
Hemos perdido el laboratorio de Física y, además, en el laboratorio de Biología y Geología, la parte destinada a los microscopios y lupas binoculares se utiliza como aula ordinaria. Además, el laboratorio de Química también se utiliza como aula ordinaria para impartir algunas materias, lo cual impide la organización de las prácticas. Esto repercute negativamente en la calidad de la enseñanza porque no se pueden hacer todas las prácticas científicas necesarias para que el alumnado logre el nivel básico. Tampoco permite desarrollar las situaciones de aprendizaje en ciencias que promueve la LOMLOE. Habrá alumnado que acabe su etapa educativa sin saber qué es un laboratorio.
Talleres de Tecnología
Hemos perdido un taller de Tecnología, que se soluciona trasladándolo al laboratorio de Física; por lo tanto, el centro se queda sin este laboratorio. Este hecho ha producido inconvenientes, puesto que durante buena parte de la primera evaluación no hemos dispuesto de los talleres hasta que no se hubo realizado el acondicionamiento de la instalación eléctrica del nuevo taller. Además, el almacén continúa situado junto al antiguo taller, lo cual genera inconvenientes para el traslado de algunos materiales y herramientas necesarias en clase.
Biblioteca
No tenemos biblioteca, lugar fundamental en los centros educativos. Como en el curso 2022-2023, después de la pandemia, nuestro centro, en un principio, volvería a la normalidad en sus espacios disponibles, se reinició un proyecto alentador para renovar nuestra biblioteca, el cual, desgraciadamente, ha quedado parado porque ahora este espacio está destinado a un aula ordinaria. Sin embargo, sí que hemos desarrollado ese proyecto de biblioteca, en el que ha participado activamente el alumnado de 4º de ESO en la materia de Proyecto Interdisciplinario. Con todo, estamos a la espera de recuperar el espacio donde llevarlo a cabo.
Aulas magnas
No disponemos de aulas magnas, lugares esenciales para desarrollar tareas necesarias para la actividad docente y las relaciones con otros miembros de la comunidad educativas. Además, también se utilizaban para trabajos en grupo y otras dinámicas, los cuales se hacen ahora con el alumnado repartido por los corredores.
Gimnasio y pistas
Compartimos el gimnasio y las pistas con la escuela de manera desproporcionada en cuanto al número de alumnado. La materia de Educación Física no dispone de espacio suficiente en el centro para llevar a cabo la programación establecida y nuestro alumnado se tiene que desplazar a las instalaciones deportivas locales, con lo que perdemos mucho tiempo hasta llegar a ellas, a las cuales no podemos trasladar todo el material que necesitamos para impartir las diferentes unidades didácticas (palos de hockey, voleibol, bádminton, colchones…). Además de este inconveniente, observamos que parte del material se deteriora o se pierde, tanto por el transporte como por el uso que hace el alumnado de la escuela. A veces, cuando llueve, el alumnado se ha tenido que ir a su aula de tutoría por no poder utilizar nuestras instalaciones cubiertas.
Patio
El espacio designado para el esparcimiento de nuestro alumnado se ha visto reducido hasta este mes de mayo. Además, ha quedado muy descompensado teniendo en cuenta el número de alumnado que tiene el instituto respecto a la escuela. Esta concentración de alumnado en menos espacio provoca más conflictos. Además, no disponemos del jardín norte del centro donde está ubicado el itinerario de plantas autóctonas, recurso fundamental para el Departamento de Biología. Tampoco tenemos un acceso directo desde el centro al espacio de jardín y huerto porque está cerrado, lo cual retrasa los desplazamientos para las sesiones prácticas. Con el calor hemos detectado que en el patio hay pocos espacios de sombra y los alumnos se tienen que quedar al sol. Además de esto, también hemos tenido que renunciar al proyecto de patios inclusivos que habíamos diseñado para el actual curso.
Aulas de idiomas
No disponemos de un espacio para poder realizar en condiciones los exámenes orales a nuestro alumnado, por lo cual tenemos que bajar al patio o hacerlos en los corredores, con las interrupciones y molestias que esto supone. El hecho de no disponer de una aula para, por ejemplo, la realización de exámenes, hizo que este curso tuviéramos que movilizar a todo nuestro alumnado que se presentaba a las pruebas homologadas A2 a un recinto facilitado por el Ayuntamiento y localizado en el centro del pueblo. Este espacio estaba ocupado por personal que hacía su trabajo y también se vio afectado por las molestias que les pudimos causar, como por ejemplo los audios que este examen contiene y que también tuvieron que escuchar los trabajadores.
Ruido
Como la mayoría de las clases están orientadas hacia el patio destinado a la escuela, que hace uso de él durante las horas lectivas del instituto, el ruido es insoportable. No se puede dar clase con las ventanas abiertas y el alumnado se queja porque no puede atender a las explicaciones o concentrarse en los exámenes. Con la llegada del calor necesitamos abrir ventanas y la situación empeora.
Banco de libros
No tenemos espacio para el banco de libros. Todo el material está repartido por todos los espacios vacíos del centro y es imposible la gestión de las incidencias.
Salidas de emergencia
En caso de incendio, no tenemos acceso a todas las salidas de emergencia, algunas de las cuales se encuentran bloqueadas, y el plan de evacuación no se podría llevar a cabo. Además, se tendría que haber hecho un nuevo plan de evacuación que considerara la presencia del profesorado, alumnado y personal de administración y servicios del CEIP Escriptor Canyís junto con el de nuestro centro.
Economía
La situación económica del centro es preocupante, puesto que hemos asumido hasta el momento todos los gastos (luz, agua, etc.) de la escuela con el presupuesto destinado al instituto. Además de estos gastos, hemos asumido otros derivados de la llegada del CEIP: instalación de proyectores, pantallas de proyección y pizarras en estas nuevas aulas, adecuación de mobiliario, etc. Además, la presencia de la escuela nos ha impedido llevar a cabo dinámicas de ahorro y sostenibilidad, como es apagar la luz por plantas en el horario de tarde mientras se lleva a cabo la limpieza.
Por todas estas razones pedimos a las administraciones implicadas que encuentren otra solución de manera urgente a un problema que no tendría que haber afectado nuestro centro, ya que hay otras alternativas plausibles para ubicar el CEIP. Es necesario para Monòver que el único centro público de secundaria y de bachillerato dispongo del espacio necesario para llevar con normalidad la tarea educativa, puesto que toda la juventud del pueblo y la sociedad monovera saldrá beneficiada. Consideramos que nuestro alumnado no está recibiendo la enseñanza que merece por el hecho de no disponer del espacio que le corresponde.
Es por eso que el profesorado dice basta. Nos plantamos porque, si continuamos con esta situación, en el próximo curso habrá alumnado que finalizará su etapa educativa en el instituto sin haber conocido y trabajado en las condiciones deseables y con los recursos de los que dispone cualquier otro centro público de secundaria.
¡Recuperemos nuestros espacios, recuperemos nuestro centro!”