Uno de los monitores de la piscina municipal de Monóvar, ha sido condenado por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 3 de Novelda a seis meses de cárcel y una multa por sustraer material deportivo de las instalaciones.
Su botín, que rondaba aproximadamente los 4.000 euros, estaba compuesto por un equipo de música, una camilla de masajes, la torre de un ordenador y ocho bicicletas estáticas. Aunque no fue descubierto en el momento del robo, poco después intentó vender estos materiales en un portal de internet dedicado a la venta de bienes de segunda mano.
Fueron los responsables municipales, al revisar las instalaciones de la piscina cubierta municipal para poner a punto el recinto con motivo del acuerdo con la nueva empresa que gestionará la piscina, quienes se dieron cuenta de que faltaba este material deportivo.
Inmediatamente se interpuso una denuncia desde el Ayuntamiento, y las investigaciones de la Guardia Civil dieron con el mencionado anuncio en Internet en el que se ponía a venta exactamente el inventario de bienes que había sido sustraído de las instalaciones. La rapidez del proceso y las pesquisas permitieron a la Guardia Civil recuperar el material deportivo porque aún no había sido vendido, que fue localizado posteriormente en un establecimiento de Elda.
El monitor, que fue procesado inmediatamente en un juicio rápido, fue condenado tras reconocer el delito y pedir perdón. Debido a que carecía de antecedentes penales y mostró su arrepentimiento en el juicio, la cuantía de la multa fue reducida. Tampoco tendrá que ingresar a prisión, ya que el Ayuntamiento recuperó el material robado antes de que se produjese su venta.
Por otro lado, la nueva empresa que se ocupará de gestionar las instalaciones ha decidido no contratarlo como monitor de la piscina, y el condenado tiene la obligación de satisfacer el importe de la multa de forma fraccionada.